GARCÍA CÁRCEL, RICARDO
En 1992, el autor de este libro escribió una obra, ya clásica, sobre la Leyenda Negra. Veinticinco años después, en un marco muy distinto al de la euforia olímpica de entonces, se ha querido replantear el concepto tan discutido de Leyenda Negra, centrándose en la imagen crítica negativa del rey Felipe II. El extraordinario poder que esta monarquía llegó a alcanzar y la propia oscuridad del personaje han contribuido a incentivar la atención de todo tipo de miradas con los dos grandes arquetipos: el negativo, de Demonio del Sur (así lo denominó Voltaire), y el positivo, de Rey Prudente.
Aquí se disecciona el conjunto de estigmas que han determinado la imagen siniestra del rey Felipe II: su condición de rey tenebroso e impenetrable, su perfil de rey déspota y fanático y, por último, su vertiente más personal a través del estudio de la atribución de parricidio por la muerte de su hijo y heredero, el príncipe don Carlos. A la espinosa cuestión de las relaciones de Felipe II y su hijo respecto al vidrioso problema de la prisión y muerte del príncipe se dedica una buena parte de este libro.