MARRERO REAL, DAMIÁN
Amarás a tus padres por encima de todas las cosas, reza el IV Mandamiento. ¿Por encima de todas las cosas? Teo es un cincuentón que acaba de divorciarse. Profesor de Literatura y existencialista vocacional, se encuentra al borde de la depresión. Su psicóloga le encarga como terapia que redacte episodios de su infancia (esa manía canóniga del gremio). Esto da pie para que Teo rememore una infancia esperpéntica, plena de humillaciones, dominada por una madre hipocondriaca, que le ha declarado la guerra a la humanidad como forma de sobrellevar su propia existencia.
El IV Mandamiento es, en el fondo, una reflexión sobre la paternidad y la maternidad como algo que va más allá de la mera cosa biológica, de la impronta indeleble que deja en la vida adulta y una desmitificación de la familia y de su incuestionabilidad propia de nuestra cultura. Con mucho humor y con no menos drama, a lo largo de la novela se despliegan una serie de situaciones y personajes en los que muchas personas que sufrieron una infancia desdichada podrán reconocerse. Y, como el personaje de la misma, al final siempre encontrarán una salida. O no.
