GARCÍA CÁNOVAS, ANTONIO
«Los artistas son gente tan corriente como tú y como yo, frágiles, vulnerables... Un día llega algún enteradillo y los diviniza -mejor si están muertos-, y entonces se tornan intocables y consigue hacernos olvidar que, ante todo, fueron sufrientes y humildes seres humanos».
Este obsesivo pensamiento es el que hace emprender a Esteban un viaje incierto en busca de la verdad sobre la desconocida vida íntima de Velázquez, el pintor al que admira y odia a partes iguales. Cuando esta verdad se muestre a sus ojos a través de las palabras dictadas al señor de Isola por el ragazzo que amó profundamente y sin condiciones al Maestro, comprenderá el sublime impulso que da origen a la obra de arte.