Abundan la mala información, la desinformación y las noticias falsas,y cada vez es más difícil saber qué es verdad. Los políticos no estánlimitados por los hechos. Nuestro entorno mediático se ha vuelto hiperpartidista. La ciencia se lleva a cabo mediante un comunicado deprensa. La cultura de las startups ha elevado a lo mas alto el arte de los bulos. Los anunciantes hacen un guiño conspirativo y nos invitana unirnos a ellos para ver la realidad a través de todos estos bulos y aprovechar que nuestra guardia está baja para bombardearnos conmentiras de segundo orden. La mayor parte de la actividad administrativa, ya sea en la empresa privada o en la esfera pública,parece ser poco más que un ejercicio sofisticado de reensamblaje combinatorio de disparates. Estamos bastante bien equipados para detectar el tipo de mentiras de la vieja escuela que se basan en una retórica elegante y eufemismos, pero la mayoría de nosotros no nossentimos preparados para desafiar la avalancha de bulos modernos presentes en el lenguaje de las matemáticas, la ciencia o las estadísticas.