Rorty emprenderá un ingente intento por superar el paradigma epistemológico, pretendiendo abandonar la imagen platónica heredada de la filosofía y poniendo de relieve la urgencia de resolver problemas prácticos que suceden en nuestros días, ya sea en lo concerniente anuestra relación con otros o con nosotros mismos. El viraje filosófico al que estamos a punto de asistir no tratará sin más de poner atención a los problemas actuales que nos acucian, sino que se consolidará como un ejercicio continuo de desmontaje de los problemáticos supuestos ontológicos y epistemológicos en los que las teorías del canon Platón-Kant podrían haber estado ancladas durante un amplio periodo de tiempo en nuestra historia. Para esta labor, Rorty emprenderá una doble lectura de Heidegger: se servirá de él para narrar su relato anti-epistemológico y, a su vez, invertirá lapropuesta del pensador alemán desde un lugar antagónico para mostrar que Heidegger sigue aprisionado en la matriz platónica.